Se ha producido esta madrugada, lo que ha evitado daños personales. Los desperfectos materiales han resultado inevitables, puesto que se ha venido abajo parte del techo de la sacristía sobre mobiliario instalado en la misma, entre el mismo una mesa de madera tallada.
Ha ocurrido en la iglesia de las Santas Justa y Rufina, templo declarado Bien de Interés Cultural el 31 de octubre de 1971 y Monumento Nacional en 1971, con la ley de 1985 Bien de Interés Cultural.
El alcalde ha visitado la zona afectada junto al padre Satorre, que le ha mostrado los daños. Emilio Bascuñana ha reclamado a “la Conselleria de Cultura que actúe con la máxima prioridad sobre este #BIC para evitar daños mayores, a la vez que exigimos a la Administración Autonómica y Nacional, no abandonen el #Patrimonio de todos en Orihuela y asignen los fondos necesarios para mantenerlo y cuidarlo”.
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