Albert Einstein, Marie Curie y Charles Darwin, son los encargados de darnos la bienvenida al Museo Didáctico e Interactivo de Ciencias de la Vega Baja, conocido como MUDIC.
Un grupo de docentes de Ciencias de Secundaria y de la universidad formaron en el año 2007 la Asociación de Profesores de Ciencias ‘Hypatía de Alejandría’, que gracias a un convenio con la Universidad Miguel Hernández y una subvención de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) permitieron poner en marcha en el campus oriolano de Desamparados este museo con un claro objetivo: «la divulgación científica en la sociedad y el estímulo de vocaciones en particular», tal como explica según su directora, María del Carmen Perea:
Con la suma del Ayuntamiento de Orihuela al proyecto, el museo pasó a estar gestionado por una fundación que integran la UMH, la asociación de profesores y el Ayuntamiento, convertido en su principal valedor económico.
Fue el Premio Nobel de Física de 2006, Dr. George Smoot, el invitado de honor para inaugurar el MUDIC el 25 de noviembre del año 2008, y desde entonces han sido innumerables las actividades organizadas para lograr que niños, jóvenes y adultos descubran las maravillas del mundo a través de la ciencia, tanto en sus instalaciones como en visitas a otras localidades de la Vega Baja e incluso fuera de la comarca.
Hasta los 20.000 visitantes
El MUDIC ha recibido este curso en sus seis salas a más de 8.000 visitantes y espera a otros 40 centros escolares con unos 2.000 visitantes más antes de acabar el periodo escolar.
Sin embargo, el objetivo de sus gestores es que siga creciendo en calidad y en cantidad, «porque podría recibir hasta los 20.000 visitantes en un año», según relata su director pedagógico, Jesús Carnicer, quien cree necesario «contar con una plantilla estable».
Para ello haría falta una mayor presupuesto, y por tanto, una mayor financiación, pero este museo de ciencias atraviesa en la actualidad por uno de sus más difíciles momentos debido a la falta de financiación, que mantiene sin cobrar a los diez monitores que prestan su servicio sirviendo de guía a los visitantes.
Aumenta la subvención
El Ayuntamiento oriolano no ha pagado todavía los 50.000 euros que se recogían en el convenio firmado con el MUDIC para 2015, y que, según el alcalde, Emilio Bascuñana, se aumentarían hasta los 60.000 euros para este ejercicio.
La situación pone en entredicho la continuidad de las actividades del MUDIC, aunque para su directora, «no corre peligro de cerrar pese a estos serios problemas». Sin embargo, también reconoce que si los monitores dijeran que no van a trabajar hasta que cobren, «no se podría atender las visitas y temporalmente el museo podría cerrar sus puertas».
Pero los que no estan por la labor de abandonar sus puestos de trabajo son los monitores, «porque nos sentimos motivados y con la misma ilusión que el primer día», como reconoce Monse. Afirman también que la situación de incertidumbre «no se ha notado nada en el trabajo», y un cierre sería para ellos «un disgusto tremendo».
Si nada lo remedia, es muy posible que acaben la temporada el próximo 31 de mayo con cinco meses pendientes de cobro.
«Esta situación no es nueva»
Los problemas económicos parecen acompañar al MUDIC desde su creación. «Desde el comienzo no lo hemos tenido fácil», como asegura María del Carmen Perea, «porque el problema del Ayuntamiento siempre ha estado ahí, aunque este año se está alargando más y ha complicado nuestra situación».
Los responsables del MUDIC buscan otras formas de financiación y se ha planteado incluso cobrar un euro de entrada, «pero eso no va a resolver los problemas», según la directora, quien ya se ha dirigido a otras instituciones como Diputación o Conselleria de Educación para buscar fórmulas de financiación.
Precisamente esta pasada semana, el MUDIC ha acogido a nivel provincial un taller del proyecto piloto ‘Profundiza’, organizado por Conselleria y dirigido al profesorado, lo que para sus responsables da a entender la importancia de la labor que desarrolla.
Europa valora el MUDIC
El Museo Didáctico e Interactivo de Ciencias de la Vega Baja es un espacio muy valorado por los visitantes y por la ciudadanía.
Tan solo en una semana, y tras el anuncio de un posible cierre por el retraso en el abono de las nóminas, se han recogido más de un millar de apoyos, tanto en redes sociales como por correo electrónico y carta, entre los que su directora destaca el de la Red de Directores de Museos de Ciencias de España, junto con el apoyo de museos de países como Portugal Chequia, Italia y otros puntos de Europa, «lo que demuestra lo valorado que está el MUDIC tras haber participado en distintos proyectos europeos», como reconoce Perea.
Por su parte, Jesús Carnicer, su director pedagógico asegura que nadie cuestiona el valor de este museo, «porque quizá sea uno de los museos de ciencias más rentables de Europa. Se ha convertido en el referente de la divulgación científica en la Vega Baja y queremos que siga siendo así».
Algunos de quienes fueron monitores trabajan ahora de científicos dentro y fuera de España. De hecho, el MUDIC ha iniciado una línea de investigación y se realizan tesis doctorales sobre el museo, algo que tan solo ofrecen museos de ciencias tan consolidados como los de Madrid y Barcelona.
La ciencia es divertida
Cualquiera de las seis salas del MUDIC despierta el interés del visitante. Todas llevan el nombre de grandes investigadores y en ellas se muestran de forma amena sus aportaciones a la ciencia mediante demostraciones y experimentos en los que se participa de forma activa en estas instalaciones.
Las jornadas de puertas abiertas, las observaciones astronómicas, los concursos científicos y otras muchas actividades, continuarán para sacar la ciencia a la calle.
El alcalde propone que el museo busque «otras fórmulas de financiación»
El alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, se muestra convencido de que se encontrará «la mejor solución y la mejor alternativa para poder solucionar los imprevistos» a los que se enfrenta el MUDIC por la falta de pago de la subvención municipal de este año, que se eleva de 50.000 euros a 60.000 euros.
Bascuñana explicaba que el retraso se debe a «una cuestión menor», pero que administrativamente «tiene su complejidad».
Para el primer edil, la intención y voluntad del equipo de gobierno «siempre ha sido potenciarlo al máximo, porque es un museo que tiene un impacto espectacular y toda Orihuela está orgullosa».
Pero el Ayuntamiento sigue siendo la principal fuente de financiación para el museo, y un retraso en el pago de la subvención municipal complica su actividad «sin capacidad de reacción».
Bascuñana ha apostado por buscar «otras fórmulas de financiación», entre las que destacó acuerdos con entidades bancarias para que adelanten dinero hasta que llegue la subvención. También recodó la sugerencia de la UMH para aliviar la situación asumiendo temporalmente el paso de las nóminas.
Mientras el equipo de gobierno agiliza al máximo ese pago, el alcalde se pregunta si el Ayuntamiento tiene que seguir siendo el único financiador de este proyecto y propone buscar «otras colaboraciones que permitan mayor agilidad en el cobro para que esto no se repita».
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