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La Policía Local de Rojales inicia prácticas de tiro con fuego real simulando situaciones de estrés y tensión

El Alcalde de Rojales, Antonio Pérez, y el Intendente Jefe de la Policía Local, Iñaki Esparza, han asistido al inicio de los ejercicios prácticos de tiro donde participan más de 30 agentes de la plantilla local y se simulan situaciones de alto riesgo con fuego real.

Las prácticas de autodefensa y protección de los ciudadanos tienen lugar en el campo municipal de tiro en cumplimiento del Decreto 18/1995 de la Generalitat Valenciana que establece la obligatoriedad de realizar al menos dos ejercicios de esta modalidad al año, aunque en el caso de Rojales se han llegado a realizar hasta cuatro.

El primer edil y el jefe policial supervisaron esta primera práctica con fuego real por parte de los tiradores simulando situaciones de emergencia que suelen producirse en la vida real. Además comprobaron de manera especial la aplicación de las distintas medidas de seguridad durante los ejercicios. Entre ellas, la asistencia de una ambulancia en el lugar en prevención de cualquier accidente o incidente.

Antonio Pérez calificó los ejercicios como “vitales para la función que realizan a diario nuestros agentes, tanto para su seguridad como para la de la población civil, ya que en su labor encomendada se enfrentan en ocasiones a situaciones de máximo riesgo y deben estar preparados”.

Los ejercicios se realizarán de manera escalonada por parte de los agentes en el campo de tiro local, utilizado en ocasiones por otras plantillas de localidades cercanas y por agentes de la Guardia Civil.

En el caso de Rojales, además de disponer de unas instalaciones para el adiestramiento en tiro se cuenta con varios agentes instructores en las categorías profesionales necesarias, director (máxima capacitación de la Comunidad Valenciana) e instructor de tiro. “Se trata de un equipo de instructores que se han volcado es esta tarea, que innovan y perfeccionan cada uno de los ejercicios que luego realizan en el campo de tiro”, explica Iñaki Esparza, quien considera que contar con un campo de tiro, con instructores y con el apoyo continuo del Ayuntamiento, “hace que nuestros agentes sean de los más cualificados y preparados en este campo, redundando todo ello en la mejora de la seguridad de los ciudadanos de Rojales y de los propios agentes”.

El responsable policial destaca que los ejercicios buscan poner en tensión o casi al tirador que hace la práctica, en una situación de estrés lo más similar posible a una situación de fuego real, “de ahí la necesidad de realizar esta formación”.

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