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La falta de colaboración ciudadana y la escasez de medios dejan enseres en la calle varios días sin recoger

La Orihuela que tiene la consideración de Gran Ciudad y la Orihuela que aspira a ser algún día Patrimonio de la Humanidad continúa ofreciendo en alguno de sus rincones una imagen que en otras ciudades hace años que no se contempla. No es tan difícil tropezarse con un colchón o viejos muebles amontonados junto a un contenedor de residuos, o depositados en algún solar en pleno casco urbano.
Se trata de una lamentable estampa contra la que lucha el servicio de recogida de enseres de la Concejalía de Limpieza Viaria de Orihuela, y que, pese a los años que lleva funcionando, no ha conseguido erradicar esa práctica. Afortunadamente son cada vez menos los que dejan en la calle todo tipo de cachivaches y trastos, sobre todo muebles.
El Ayuntamiento retiró de la vía pública durante el pasado año un total de 900 toneladas de enseres, según asegura la concejal de Limpieza Viaria y Recogida de Residuos, Noelia Grao. Tal como reconoce la edil, «quizá no hemos sabido comunicar adecuadamente cómo funciona este servicio», consciente de que la colaboración es la clave del éxito para que las calles estén más limpias.
Es importante recordar que este servicio recoge únicamente enseres domésticos y de pequeños comercios, como muebles, sillas, colchones y electrodomésticos, pero no le compete la retirada de obras ni mudanzas completas, para lo que se debe contratar los servicios de contenedores homologados a tal efecto.
Pero además, estos enseres pueden suponer un peligro para los transeúntes, y se ha dado el caso de un invidente que cayó al suelo tras tropezar con un urinario abandonado, o de una mampara de cristal apoyada en un contenedor que cayó y se rompió, dejando esparcidos numerosos trozos de cristal. Ni los restos de obra se deben dejar en la calle ni los cristales, que pueden ser llevados a cualquier cristalero.
La concejalía se enfrenta también a quienes cuando ven estos enseres a las 9 de la mañana, no piensan en la mala acción de un vecino, sino que culpa a los servicios municipales de no haberlo recogido esa noche. Pero lo cierto es que la retirada de enseres se realiza en el casco urbano y pedanías, los lunes y miércoles por la noche, mientras que en la costa se organiza en base a los avisos.
Noelia Grao recuerda que ese aviso se puede realizar por teléfono, a través de facebook y twitter en ‘Limpieza Viaria y RSU Orihuela’, y también mediante el servicio de Línea Verde. Además, prácticamente todos los contenedores grises llevan una pegatina con instrucciones y el teléfono.

«Existe escasez de recursos»
La falta de medios es uno de los problemas de la concejalía, «porque el servicio es mejorable», tal como admite Grao. Actualmente se dispone de 2 camiones de repaso en la ciudad, otros 2 para pedanías y un solo camión para la costa. La edil anuncia que en los presupuestos de 2016 figura una partida que permitirá adquirir un nuevo vehículo para este fin.

En 2016 y sin ecoparques
Orihuela debería tener dos ecoparques: uno en la ciudad y otro en la costa. Así se recogía en el pliego de condiciones que adjudicó la última contrata, pero años después no existen. Grao reprocha al anterior equipo de gobierno «que no hizo nada por corregir esta situación, porque es algo que no se tenía que haber olvidado».
Según confiesa la concejal, «mi intención es resolver esto cuanto antes», y asegura que en el presupuesto de 2016 figura una partida para la construcción de un ecoparque, «que se podría ubicar en el casco urbano, aunque hay que buscar el mejor emplazamiento posible, y eso lleva su tiempo», pero admite que «se está trabajando en ello».
En la actualidad, todos esos enseres que se recogen de las calles son llevados a la planta de Jijona, donde el mobiliario de madera y colchones se trituran y se compactan, mientras que los electrodomésticos se reciclan.
El ayuntamiento dispone de dos ecoparques móviles, que hace años se dejaban en varias zonas del municipio de forma itinerante. Actualmente están en reparación y será un servicio que se volverá a prestar, como anuncia la edil.

Lo que debemos hacer antes de sacar los trastos a la calle

Cualquier ciudadano que quiera depositar en la vía pública un objeto del que desee desprenderse, principalmente muebles y electrodomésticos, puede llamar al teléfono de la concejalía, 965306178, e indicar cuándo y dónde va a depositar los enseres.
Es importante saber que el servicio de recogida de enseres en Orihuela Ciudad y Pedanías se presta los lunes y miércoles por la noche. Se deben dejar en la calle a partir de las 21.00 horas, para no entorpecer la vía y que no suponga un peligro para transeúntes.
Desde la concejalía, se incluirá su solicitud en la ruta del camión de recogida del día acordado.
En Orihuela Costa el servicio de recogida de enseres funciona por zonas y días, puesto que, debido a la afluencia de visitantes y vecinos en temporadas altas, es más difícil organizar este servicio. El teléfono al que dirigirse en la zona del litoral es el 966760000, extensión 49. Al igual que en la ciudad y pedanías, se debe llamar antes de sacar los enseres a la calle y le indicarán qué días y dónde podrá hacerlo.

Las sanciones por depositar enseres en la vía pública fuera de horario y sin avisar llegan hasta los 3.000 euros

La concejal de Limpieza Viaria y Recogida de Residuos Sólidos, Noelia Grao, pide la colaboración ciudadana, pero también advierte que el capítulo III del artículo 84 de la ordenanza que regula el servicio de recogida de enseres, contempla importantes sanciones por depositar en la vía cualquier enser fuera de horario y sin previamente haber avisado para su retirada.
«Si la Policía Local observa a cualquier vecino sacando a la calle muebles o electrodomésticos y no ha avisado, procederán a denunciarle y podrá ser sancionado».
La ordenanza recoge tres tipos de sanciones, según sea considerada la falta como leve, grave o muy grave. En el primer caso, la sanción económica oscila entre 300 y 750 euros; en el segundo entre 750 y 1.500 euros, y las muy graves pueden llegar a sancionar esa falta de civismo con hasta 3.000 euros.
«Si todos somos capaces de cumplir la normativa, se lo ponemos más difícil a aquella persona que no la cumple», según indica la responsable de la limpieza viaria.

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