El alcalde de Algorfa, Manuel Ros, ha calificado de “un error que nunca debió ocurrir” el conducir bajo los efectos de bebidas alcohólicas y dar un positivo de 0,84 al ser interceptado en un control de la Policía Local de Benijófar el pasado sábado noche.
Ros ha sido condenado por un delito contra la Seguridad Vial al triplicar como conductor el límite permitido de alcohol, por lo que ha sido condenado a la retirada del carnet de conducir durante un año y una multa de 720 euros.
En una breve nota facilitada a los medios de comunicación, el alcalde de Algorfa explica que los hechos “ocurrieron dentro del ámbito de mi vida privada”, y asegura que “por tanto no se ha visto afectada, mi faceta pública, ni mi gestión como alcalde al frente del Consistorio”.
También señala que no se trata de ningún asunto relacionado con corrupción, ni con la gestión municipal, “por lo que asumo la responsabilidad de estos actos, ocurridos en el ámbito de mi vida privada y pido disculpas. Lo lamento profundamente y puedo asegurar que estos hechos no volverán a ocurrir”.
El comunicado de Ros finaliza manifestando que va a continuar “como hasta ahora, trabajando por los intereses de los vecinos y vecinas de Algorfa”, y espera que estos hechos “no sean utilizados malintencionadamente, por otras personas, para obtener rédito político”.
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