El Tomicus Piniperda, un insecto que se conoce comúnmente como barrenillo o perforador de los pinos se ha convertido en la mayor amenaza para la sierra de Orihuela, la principal zona afectada en la provincia de Alicante como consecuencia también de la falta de lluvia, lo que ha propiciado la acción del insecto ante la debilidad del arbolado.
Si su efecto lo hemos podido ver en los últimos dos años al dejar un panorama de miles de pinos secos con un color muy distinto a su verde natural, las consecuencias de su acción han obligado a planificar la tala de casi 12.000 ejemplares.
A punto de cumplirse un mes del inicio de los trabajos de eliminación de los ejemplares muertos por parte de la Consellería de Medio Ambiente, esta actuación presupuestada en 57.000 euros, está previsto que continúe hasta finales de febrero, cuando se complete el denominado ‘Plan de eliminación de biomasa forestal dañada por fenómenos meteorológicos en la sierra de Orihuela’.
De esta forma, la Generalitat ha atendido las reiteradas solicitudes que ha venido presentando la Concejalía de Medio Ambiente en los últimos dos años, tal como explica el edil Miguel Ángel Fernández, quien asegura que en este caso, la administración «ha pecado de ineficacia y la solución se ha dilatado mucho». Desde la concejalía oriolana se critica la tardanza en actuar «ante el riesgo de incendio para nuestra sierra y por el peligro de caída para los vehículos que circulan por la carretera próxima a la zona afectada». Como recuerda el edil, «han sido dos veranos con un alto riesgo de incendio acechándonos».
Desde Consellería afirman que en el último año no ha existido mucha afectación, pero ante la falta de lluvia el peligro ha continuado.
Más de 11 km. afectados
La zona donde se concentran los daños se extiende por toda la vertiente sur de la sierra, desde el extremo este, pasando por el cabezo de San Miguel, al extremo oeste, ya lindando con la Región de Murcia, y abarca una longitud superior a los 11 kilómetros, divididos por Consellería en 17 rodales.
Los trabajos comenzaron en la ladera de la carretera nacional Murcia-Alicante, a la altura del mirador del Palmeral, y en una superficie de 14’23 hectáreas de monte público perteneciente a Consellería, donde un grupo de operarios de la empresa pública TRAGSA retiró manualmente los primeros ejemplares que se encontraban junto a grandes rocas para evitar posibles desprendimientos. Durante los primeros días de diciembre, se sumó a esta tarea una máquina especializada para la total eliminación de los ejemplares secos.
La llamada retro araña dotada de trituradora de martillos, está actuando desde entonces en una zona con pendiente media del 50% y una densidad de 800 pies por hectárea, y eliminará el 75% de la superficie afectada, identificada por Consellería como ‘Rodal 2’ de la sierra oriolana. «La máquina tritura ‘in situ’ los restos de los pinos secos, y los convierte en una cubierta vegetal que se emplea en la recuperación del terreno afectado, ya que retiene la humedad y genera nutrientes», según explica el edil, quien detalla que una elevada concentración de pinos «propicia la falta de nutrientes y al final les afecta a todos».
La sierra ‘pelada’
Lo cierto es que la imagen de la zona completamente pelada sorprende a cuántos circulan por la carretera nacional 340 o hacen senderismo por las cercanías; una visión muy distinta de la sierra que durante años hemos conocido.
Miguel Ángel Fernández recuerda que, en fases desarrolladas en años anteriores, «ya se eliminaron miles de pinos afectados en varias hectáreas de zona cercanas al cementerio», mientras que asegura que en la zona sur, queda por hacer alguna actuación de limpieza que el edil espera durante este año, «porque desde la concejalía vamos a seguir insistiendo en limpiar las hectáreas que falten».
«Las especies autóctonas van a sobrevivir mejor»
Tras la eliminación de casi 12.000 pinos afectados, la Consellería de Medio Ambiente comenzará con la reforestación de la zona tratada.
Según contempla la memoria valorada de esta actuación, «para acelerar la implantación de una nueva cubierta vegetal se proponen trabajos de reforestación con especies más adecuadas a las condiciones climáticas de la zona».
Los trabajos consistirán en la apertura de 1.423 banquetas de 1 metro cuadrado de superficie y 50 centímetros de profundidad, donde se plantarán las especies previstas y se construirá rebalsetas para recoger las escasas precipitaciones. Además, se instalarán ‘castilletes de piedra’ para proteger la planta del viento y preservar la humedad del terreno.
En cuanto a las especies contempladas para esta reforestación, las principales serán, ‘Tetraclinis articulata’, también conocida como, entre otros nombres, ciprés de Cartagena, que ocupará un 30% del total del arbolado, mientras que la ‘Olea Europaea’ u olivera, será la especie que ocupe un 20% de la superficie reforestada. Entre otras especies, se plantará Espino Negro, Cornical Canario y plantas arbustivas como la Ephedra.
El concejal de Medio Ambiente oriolano, Miguel Ángel Fernández, señala que estas especies, «van a sobrevivir mejor en las condiciones a las que se enfrentan en esta zona», y recuerda que Consellería y el Ayuntamiento ya actuaron en la zona de La Aparecida mediante un proyecto de reforestación con especies autóctonas capaces de resistir mejor a largos periodos de sequía.
El monte espera los DUSI
El Ayuntamiento de Orihuela contempla en el presupuesto de este año una partida que ronda los 170.000 euros para actuaciones de mejora en el entorno del Monte de San Miguel, de competencia municipal.
El responsable de Medio Ambiente asegura que el proyecto subvencionado con fondos europeos de la llamada estrategia DUSI, incluye la reforestación de ese entorno, que el edil espera poder acometer durante este mismo año.
Según explica Fernández, la apuesta del equipo de gobierno es elaborar «un plan serio de ordenación de los recursos y una reforestación, además de otras actuaciones menores de mejora que se puedan desarrollar en el monte».
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